Nos fuimos a la Green Island que es parte de la Gran Barrera de Arrecife en Australia, fue una excursion de todo el dia, en un barco como para 100 personas. Estuvo nublado en la mañana y chispiando, pero templado. La isla se encuentra como a 15 millas nauticas de Cairns que es la ciudad que visitamos.  Cuando llegamos primero nos fuimos a esnorquelear y estuvo muy lindo; hubo corales, peces, una tortuga preciosa. Despues almorzamos un buffet-lunch con ensaladas y emparedados. Y llego la hora de las escursiones, primero en el Semi-submarino donde pudimos ver mas peces y como les daban de comer se amontonaban en los cristales de las ventanas del submarino que estan diseñadas para que tengas toda la vista posible, muy practico. Estaria bien si le pusieran un piloto automatico, y que trabajara con celdas solares en vez de combustible. Paseamos por el muelle y vimos a varios turistas de los que venian con nosotros, adentrarse en las aguas con trajes especiales para protegerse de las medusas. La mayoria eran japoneses y por eso se dieron instrucciones e invitaciones por los altavoces del barco en Ingles y en Japones mientras llegabamos a las costas. Despues llego la escursion del bote con fondo de cristal… Tambien vimos mas peces y les dieron de comer, una gaviota nos acompaño y se dio un festin con la comida que le convidaron de los peces. Despues nos fuimos a pasear por la isla que tiene arboles con orquideas colgando y muchas mas plantas tropicales. Tambien tiene un museo nautico y puedes ver mas cocodrilos y una exposicion de artefactos raros de la Melanesia, no faltaron las tiendas de recuerdos, donde lo mas simpatico fue ver a los sapos hechos monederos y pintados de colores chillantes, se veian chistosisimos pero por supuesto que no compre ninguno! Se imaginan que al ir  de compras abrir la boca del sapo para sacar el dinero! jajajaja.

Y llego la hora de regresar a la ciudad, a la mitad del camino empezo a llover, anclamos y se hizo una cola para desembarcar… y todo estuvo muy bien hasta que empezo a llover torrencialmente por media hora y cuando por fin llegamos al autobus para que nos llevara al hotel estabamos empapados!! Y aunque nos secamos y nos pusimos camisetas secas, el aire acondicionado del autobus nos hizo titiritar todo el camino de regreso. El chofer nos platico de las casas que se vendian, cuales eran los lugares caros, los baratos para vivir, tambien que el tenia una granja de cocodrilos  para vender la piel para articulos  variados como botas, bolsas y cinturones. Les da de comer pollos, y solo son sacrificados por pedido. La piel se envia a Italia donde curten la piel… El ultimo pedido habia sido de un señor que le dio de cumpleaños a su esposa una bolsa de piel de cocodrilo que valia miles de dolares… y llegamos al hotel listos para un baño con agua calientita y ropa seca…. Fue una buenisima excursion y aunque vimos anemonas, Nemo no se encontro por los alrededores, me parece que se habia ido de vacaciones!… Y llego la cena, pero  sera para la proxima.. Ciao